miércoles, 24 de marzo de 2010

Earth Hour 2010

Ya se acerca la Hora del Planeta otra vez. Este sábado 28 de marzo, nos unimos a un movimiento fantástico mundial, que cada año crece y tiene más importancia. El Earth Hour, o La Hora del Planeta como se llama aquí en México comenzó hace 3 años en Australia, con 2.2 millones de casas y negocios apagando la luz durante una hora para mostrar interés por la lucha contra el cambio climático. Tuvo tanto éxito que un año después ya se había convertido en un movimiento mundial con más de 50 millones de participantes en 35 países. Monumentos mundiales como el Coliseo de Roma y El Golden Bridge de San Francisco entre otros apagaron sus luces como símbolos de esperanza. El año pasado 2009, que fue el tercer año del evento, se volvió el evento más importante del mundo en la lucha contra el cambio climático. Cientos de millones de personas en 88 países, mostraron su apoyo al planeta uniéndose a la causa, apagando sus luces durante una hora.

Este año el evento se lleva a cabo el próximo sábado 27 de Marzo a las 8.30 p.m. hora local. Es una llamada a todos los ciudadanos del mundo, a las empresas locales y multinacionales, a gobiernos y organizaciones, escuelas y museos, a quien quiera participar como muestra de afecto y apoyo a nuestro planeta Tierra. Hasta ahora más de 500 ciudades de todo el mundo se han comprometido a participar. No dejen de participar ustedes también. ¡Apaguen sus luces una hora! Tenemos que asumir la responsabilidad, tenemos que luchar todos juntos para salvar este planeta tan bello que tenemos y que esta tan urgido de ayuda. Juntos podemos hacer los cambios necesarios para agarrar un camino nuevo, un camino responsable que nos va a llevar a un mundo más limpio, más sano y más bello. Se pueden registrar en la siguiente dirección: http://wwf.org.mx/la-hora-del-planeta/. Aprovechen esta oportunidad para hacer un evento en sus oficinas, en sus escuelas o en sus casas.

En estos días hay eventos diferentes para honrar el movimiento y aprovechar la fecha. En Cancún hay un foro de Cambio Climático el 23 de Marzo, en La Paz se apagan las luces en el kiosco del Malecón y habrá actividades diferente durante el día, en la Ciudad de México se reunirán en el Zócalo entre otras actividades. Vamos a poner a Querétaro en el mapa. Vamos a mostrar al mundo que somos una fuerza con quien puede contar.

El Agua

El próximo 22 de marzo otra vez vamos a celebrar el Día Mundial del Agua. Aprovechen ese día, dándole la importancia que merece. Existe para crear consciencia, y para exponer temas importantes relacionados con el agua. Háganlo en casa, hablen con sus hijos para que aprendan desde ahora como cuidar el agua. Es una buena excusa para llevarlos a algún lago o río, a tomar una agua fresca, a comer raspados o paletas de hielo, o para hacer cualquier otra actividad relacionada con el agua. Seguramente tienen muchas ideas buenas de actividades que puedan realizar en familia. Puede ser realmente una celebración, para dar gracias que todavía tenemos acceso al agua fresca, que no somos de los más desafortunados que no tienen sistema sanitario adecuado, que no vivimos en una zona donde el agua que tomamos esta contaminada y nos enferma hasta con consecuencias mortales. Hay países mucho más desafortunados, pero en algunas partes de México el agua es un problema grave, en algunos simplemente no hay, y en otros causando enfermedades intestinales hasta con consecuencias fatales.

Podemos celebrar, aprender y enseñar, este es un día que se trata de eso, crear consciencia. Aunque ahora somos de los afortunados, realmente no se trata de suerte. Tenemos que luchar para que no seamos nosotros parte de la estadística de las personas sin acceso de agua limpia. Nosotros, ciudadanos del mundo, somos responsables de la situación que hoy en día se vive. La actividad humana es la causa de los escases de agua que hoy existe en el mundo. Hemos estado contaminando el agua los últimos años de una forma tan irresponsable, y tan sistemática, que ahora nos toca hacer algo para solucionar el problema. Tenemos que empezar a cuidar mejor este recurso tan valioso que tenemos, porque es un recurso natural, no sustituible. Estamos acabando con otros recursos de la tierra como el petróleo, pero allí todavía podemos buscar otras fuentes de energía, energías alternativas. Eso es algo que no podemos hacer con el agua. Si lo seguimos contaminando, en algún momento se acaba, y no lo vamos a poder sustituir por otra cosa. Lo tenemos que cuidar porque no nos queda de otra. El agua es fuente de toda la vida, y tenemos que empezar a tratarlo con más respeto. La contaminación de agua afecta la salud de la tierra, y también afecta la salud de nosotros los seres humanos.

En casa hay dos cosas que podemos hacer para cuidar el agua, primero evitar la contaminación del agua y segundo bajando el consumo. La contaminación del agua evitamos por ejemplo escogiendo productos de limpieza biodegradables. Necesitamos tener mucho cuidado con los productos contaminantes de la casa, como son los aceites, pinturas, solventes y más. Reduciendo el uso de estos productos es el primer paso, pero necesitamos un lugar seguro y controlado donde llevar lo que seguimos usando en casa. Debería de haber un depósito municipal para residuos peligrosos pero en espera de eso lo tiramos en la basura normal tapando bien el frasco y protegiendo el recipiente de alguna forma por ejemplo con una bolsa de plástico.

Del ahorro de agua hay mucho que podemos hacer también. Desafortunadamente hoy en día nada más una pequeña parte del agua en las casas se recicla para riego o para otros usos, pero eso es algo que va a tener que cambiar. Es un tema que vale mucho la pena estar repitiendo y acordando. Hoy les voy a dar algunos tips de cómo ahorrar agua en casa.

Kerstins ECOtips con 10 formas sencillas para ahorrar agua

1. Llenar un vasito de agua para lavar los dientes, o mínimo cerrar la llave mientras nos cepillamos.

2. Tomar baños más cortos, apagando el agua mientras nos enjabonamos.

3. Poner una cubeta en la regadera para usar el agua que se tira por ejemplo para riego.

4. Tirar pañuelos desechables en el bote de basura en vez del escusado para no jalar el baño innecesariamente.

5. Lavar el coche con una cubeta de agua en vez de usar la manguera.
6. Lavar el patio y la cochera con escoba y una cubeta de agua en vez de usar la manguera.

7. Regar temprano para que no se evapore el agua. El riego automático gasta menos agua que el riego manual.

8. Checar y reparar fugas de agua.

9. Usar la lavadora y el lavavajillas con la carga completa y el programa adecuado. Lavando los platos a mano gasta más agua que un uso correcto de lavavajillas.

10. Usar un cepillo cuando enjuagamos los platos llenando el fregadero con poquita agua para no dejar la llave abierta.

Si enseñamos a los niños desde chiquitos a respetar y a cuidar el agua, lo van a hacer siempre sin que les cueste trabajo. Vamos a asegurar que tengan acceso de agua limpia también en el futuro. Entre todos hacemos una gran diferencia.

El Costo Real de la Carne

Podríamos pensar que el costo de la carne es lo que vemos marcado, el precio del paquete del supermercado, o los pesos por kilo que pagamos en el mercado o en la carnicería. Desafortunadamente esto es nada más una parte del costo real de cada kilo de carne que consumimos. Tenemos que ver el impacto ambiental de la carne y las consecuencias negativas que tiene en la salud de los seres humanos y no estoy hablando nada más de las hormonas y los antibióticos que usan en la producción de carne.

Brasil es el exportador de carne de res más grande del mundo. Mucha de esa carne se exporta como carne natural, carne de libre pastoreo. Suena muy bien, y yo estaría feliz de tener la opción de comprar carne de esa calidad. Me imagino vacas felices, carne limpia, una producción en armonía con la naturaleza. Desafortunadamente esta imagen no se acerca a la realidad. Si vemos las vacas en dichos ranchos, si podemos pensar que la imagen que les describí fuera realidad, espacios enormes para las vacas, el pasto más verde que han visto, una imagen realmente bella, pero si investigamos un poco más al fondo vemos una realidad muy triste.

Para lograr este pastoreo libre, primero se talan los bosques tropicales, y queman lo que queda para aplanar y dejar espacio para sembrar y para el pastoreo. Esto es uno de los problemas más graves en la lucha contra el cambio climático. Estamos destruyendo los pulmones de la tierra, la selva que nos limpia el aire y combate la contaminación, la selva cuando se convierte en tierras agrarias en vez de limpiar empiezan a soltar gas metano que contamina el medioambiente. Los dueños de la tierra en Brasil por ley tienen que conservar el 80% de los arboles, pero esto no funciona en realidad, demasiado seguido cortan todos los arboles para poder sembrar soya o caña de azúcar, (otras industrias muy importantes en Brasil) o para pastoreo de las vacas. Ven un ingreso rápido, y para darles de comer a sus hijos piensan en corto plazo, no en el impacto ambiental que esto puede tener. No basta con la tala, para que pueda crecer el pasto en estas tierras usan un químico llamado 2, 4D. Este químico mata todas las plantas excepto el pasto, y por supuesto esto lo absorbe la carne. Sale con los excrementos de la vaca tan concentrado que no se puede usar para abonar – porque mata todo menos el pasto. Aparte de este químico se usan muchos otros tipos que están prohibidos en Europa y muchos otros países, químicos que se absorben por la piel, químicos de los que se sospecha, dan cáncer, que afecta la fertilidad y que causa enfermedades pulmonares. Químicos muy tóxicos que no nada más afecta la salud de las personas que trabajan con ellos, también afecta la salud de la tierra. Aparte de la triste realidad de que puede tener hasta consecuencias fatales en los que trabajan estos químicos, nos afecta la salud a los consumidores de carne. Y eso que es una carne que se vende como carne natural, ¿cómo será lo demás?

Esto es una realidad de la carne brasileña, pero no es el único país del mundo que usa químicos tóxicos en la producción de comida. Tenemos que investigar más a fondo, que estamos comiendo realmente. Que productos están permitidos en México, porque aunque esto se trata de la carne brasileña, también en otros países se usan químicos, hormonas, antibióticos y más para una producción más “eficiente”. No podemos culpar a los ganaderos solamente, tenemos que tomar responsabilidad por lo que consumimos. Por otra parte, si supiéramos todo lo que contiene la comida, seriamos más exigentes. Necesitamos una legislación que obligue a una transparencia mayor en el sector alimenticio. Yo quiero estar segura de lo que estoy comiendo. Tenemos el derecho de poder comer comida real, comida limpia y segura. ¡Tenemos el derecho de escoger! Seguramente (y ni siquiera es seguro) una carne libre de hormonas, libre de toxinas cuesta más en pesos que una carne contaminada, pero no podemos olvidar el costo real, ¿qué precio estamos dispuestos a pagar?

viernes, 5 de marzo de 2010

5 de Marzo, Día Mundial de la Eficiencia Energética

Esta semana se celebra el Día Mundial de la Eficiencia Energética, y es una buena oportunidad para revisar el consumo de energía de nuestras casas. Este día tiene sus orígenes en Austria, donde fue la primera conferencia internacional de Eficiencia Energética en el 1998. Este año la conferencia WSED (World Sustainable Energy Days), se lleva a cabo del 3 al 5 de Marzo en Wels, Austria. Se presentan diferentes propuestas y proyectos de energías renovables, de energía sostenible, y se reúne gente de todo el mundo; empresas, expertos en energía renovable y políticos. Nos hemos dado cuenta que no podemos seguir consumiendo de la misma forma, que las energías no renovables justamente no se renuevan, y además el uso de energías sucias contamina nuestro planeta, tiene efecto en el clima, en flora y fauna, y en nosotros los seres humanos también. La contaminación no nada más afecta al medioambiente, tiene efectos negativos en nuestra salud. Necesitamos encontrar una solución mundial para contar con alternativas limpias como la energía eólica o la solar, pero también tenemos que ver las formas de bajar el consumo de energía. Como ser más eficientes en nuestro consumo, hacer consciencia para que todos nos unamos a esta lucha. Lo ideal sería seguir con los mismos beneficios, recibir las mismas comodidades y servicios sin contaminar y sin efectos al medioambiente, pero mientras tanto, tenemos que cambiar nuestros hábitos, tenemos que hacer cada quien todo lo posible para dejar menos huella ecológica, para reducir los impactos ambientales.

Kerstins ECOtips para consumir menos energía

1. Cambiar los focos de la casa por focos ahorradores.
2. Apagar las luces al salir de un cuarto.
3. Aprovechar la luz de día dejando que la luz entra a los cuartos, sin tapar las ventanas con cortinas obscuras.
4. Apagar los equipos electrónicos que no se están usando (la computadora, la televisión, la radio). Recuerda que hasta apagados varios equipos consumen energía, y vale la pena desconectarlos.
5. Echar cargas completas en lavadora y lava vajillas.
6. Secar la ropa al aire, en vez de usar secadora.
7. Tapar las ollas, para reducir el tiempo de cocción.
8. No dejar abierto el refrigerador más tiempo que el necesario.
9. Enfriar al aire, la comida antes de meterla al refrigerador.
10. Al comprar nuevos aparatos eléctricos y electrodomésticos, elegir aparatos con alta eficiencia energética.

Acuérdense de que todo lo que hacemos cada uno de nosotros sí tiene impacto en el medioambiente. Sí importa cada cosa pequeña que hacemos en casa y sí podemos minimizar nuestra huella de CO2. Si el vecino al lado gasta innecesariamente, eso no es pretexto para actuar mal nosotros también. Al contrario debemos buscar ser buenos ejemplos para nuestros hijos, familiares, amigos, y vecinos porque contagia. Nosotros tenemos el poder de cambiar, no nada más a nosotros mismos, tenemos el poder de enseñar con el ejemplo, y así van a ver que sí importa, que sí pueden cambiar en forma positiva a las demás personas.

¡Vamos a sembrar!

Aunque sigue el frío, ya es buena hora empezar una huerta casera, si todavía no lo han hecho. No estoy hablando de huertas enormes de muchos metros, aunque eso es increíble si tienen el interés y el tiempo para cuidarlo, estoy hablando de algo más chiquito, hasta en masetas si lo quieren hacer de una forma sencilla. Es algo tan bonito que hacer con sus hijos, lo pueden ver como un experimento, como una actividad familiar y por supuesto como una oportunidad de comer verdura realmente fresca y limpia. Yo este año voy a usar masetas, pero eso es al gusto de cada quien. Si lo hacemos en casa sabemos exactamente con que agua se riega, que productos y que tierra se usa, y podemos saber que no estamos consumiendo pesticidas y fertilizantes dañinos para nosotros y para el medioambiente. No hay cosa tan gratificante como cosechar una zanahoria o unas hierbas de olor que hemos cuidado desde semilla y visto crecer. Ningún jitomate sabe tan rico como el que cosechas directamente de la planta de tu jardín. Ninguna enseñanza es tan rica como la que hacemos de esa forma con nuestros hijos donde pueden ver todo el proceso desde la semilla y el cuidado que requiere hasta verlo en su plato. Si queremos enseñar responsabilidad, cuidado y respeto a nuestro planeta, esto es una muy buena forma de hacerlo porque además se van a pasar unos ratos muy bonitos con sus hijos. Así les dan la oportunidad de aprender y ver de dónde viene la comida que sirven en sus platos, cosa que para ti y para mí a lo mejor es más que obvio, pero para otras personas es todo un misterio.

Ya siguiéndolo un paso más podemos pensar en una huerta orgánica. La jardinería orgánica significa diferentes cosas para diferentes personas pero todos estamos de acuerdo de que hay que evitar pesticidas y fertilizantes sintéticos. Eso es el requerimiento mínimo, pero hay que considerar muchas cosas más. Por ejemplo el uso (o mal uso) del agua en nuestra huerta. ¿En qué clima vivimos? ¿Qué se da de forma natural en la zona? Tener una hortaliza orgánica suele ser mucho más que sembrar unas semillas orgánicas y cuidarlas sin agregar sintéticos, es toda una filosofía, un estilo de vida donde se sincroniza con la misma naturaleza, respetando tierra, agua, y aire, los elementos que si no los cuidamos afectan la vida de plantas y animales y por supuesto la vida de nosotros los seres humanos también. Una persona fiel a la filosofía orgánica se compromete a trabajar con un sistema sustentable que vive en harmonía con su entorno y busca mejorar la salud y riqueza de la tierra de forma natural, buscan una diversidad de plantas y animales en el paisaje.

Si decidimos hacer una huerta orgánica, a lo mejor debemos pensar en tener una composta también en casa. Aprovechamos los desechos de verdura y fruta, y de nuestro jardín para crear una tierra muy rica para nuestra huerta. Esa tierra que sacamos de nuestra composta es muy fértil y nos ayuda tener plantas fuertes y resistentes contra plagas, también porque es tan fértil eso hace que crezca mejor nuestra hortaliza. La composta se puede usar en vez de fertilizantes y pesticidas o por lo menos como un complemento muy bueno. La mejor forma de lograr una huerta orgánica es informándonos cómo hacerlo antes de empezar. Hay buenos tips para saber que plantas “trabajan” bien juntas para combatir plagas de diferentes tipos. Debemos saber cuánta agua requiere cada verdura o flor para plantar juntos los que tienen las mismas necesidades de agua, y de sol y sombra, etc. Podemos tapar la huerta con una gaza especial para evitar ciertas plagas.

Hay gente que prefiere experimentar y aprender haciendo, y otros que siempre estudian todo antes de empezar para estar más preparados y saber lo que les espera. No importa como lo quieran hacer, lo importante es hacerlo y disfrutarlo. No se pierdan de esta experiencia, inténtenlo por lo menos una vez, y van a ver que no va a ser la última.

El Charco del Ingenio

Si no saben que hacer el fin de semana les tengo una recomendación muy buena. Tenemos muy cerca de Querétaro un tesoro tan especial, que no se lo pueden imaginar. Es un jardín botánico, (o más bien parque y zona de preservación ecológica), que se encuentra en San Miguel de Allende, Guanajuato, y vale muchísimo la pena visitarlo. Se llama el Charco del Ingenio y es un lugar para toda la familia, donde pueden pasear, disfrutar de la naturaleza, aprender de la flora y la fauna de la zona, y nada más llenarse de la energía del lugar. He ido varias veces, y hace una semana volví a ir con mi familia y con unos amigos, pero lo increíble es que siempre nos sorprende la belleza del lugar. Esta vez estaba lleno de agua por las lluvias, y pudimos disfrutar unas cascadas increíbles durante el paseo por la cañada. Se puede escoger entre varios caminos para que la caminata sea del gusto de cada quien, y vale la pena pasar un rato en el invernadero donde tienen una variedad impresionante de suculentas y cactáceas, muchas de ellas consideradas raras, amenazadas o en peligro de extinción. Mis plantas preferidas son las suculentas, y disfruto plenamente ver la variedad tan rica que existe.

Hay muchas razones para visitar este lugar y una de ellas es porque de verdad es un lugar donde disfrutar de la belleza natural que tenemos en México, aprender de nuestra flora y fauna, compartir con nuestros hijos una experiencia diferente, conectarse con la naturaleza y con la tierra, respirar aire fresco, hacer ejercicio al aire libre, y mucho más. Por otro lado, es sumamente importante apoyar a este tipo de organizaciones civiles porque hacen un trabajo muy valioso para nuestro país y para todo el mundo, haciendo un bien para nuestro medioambiente, luchando para salvar la flora y fauna del país, que a no ser por este tipo de acciones estaría muy probablemente ya extinta. Aunque México tiene la mayor variedad de cactáceas del mundo además de una gran variedad de suculentas de otros tipos, muchos están en peligro debido a varios factores como el cambio de uso de suelo, la expansión urbana y el tráfico ilegal de algunas especies. Adentro del invernadero se encuentra aparte de estas plantas una variedad de especies acuáticas y peces nativos de la región, también en peligro de extinción debido a la contaminación de los ríos.

El Charco del Ingenio es una Asociación Civil mexicana, no lucrativa e independiente de cualquier gobierno o institución privada, creada en San Miguel de Allende en el 1998, pero el proyecto inició desde el 1989 por una organización llamada Canté AC. El proyecto fue inspirado y en gran parte realizado por el cactófilo Charles Glass, también curador del Jardín Botánico hasta su muerte en el 1998. La Asociación es responsable de un proyecto de conservación ecológica, y del cuidado de todo el territorio que pertenece a esta misma que en total suman a 180 hectáreas. Además del parque son propietarios de varias hectáreas de reservas forestales y otras reservas adyacentes, y su responsabilidad incluye la custodia de una colección botánica importante de especies mexicanas.

Aparte de los paseos que podemos hacer, en el parque ofrecen una serie de actividades durante el año, como paseos guiados, temazcales, cursos y talleres, y festejos de diferentes tipos. Uno de los propósitos principales del proyecto es la educación ambiental de la población local, y en verano ofrecen cursos de verano para los niños. No se pierdan de este lugar magnifico, vale mucho la pena visitarlo. La entrada es de 40 pesos, y los niños menores de 10 años no pagan, para pasar un día en familia, eso es prácticamente un regalo. Igual y nos vemos por allí un día de estos.

Hablando con Nuestros Hijos

Es muy importante hablar con nuestros hijos para saber que es lo que saben del cambio climático, que han escuchado del calentamiento global, y que saben de cómo cuidar el medioambiente. Desafortunadamente lo que más escuchamos, o lo que más ruido nos hace es toda la información negativa, las noticias alarmistas, y eso nos puede afectar de manera negativa, nos puede paralizar en vez de hacernos cambiar nuestra forma de vivir. Nosotros somos adultos y se supone que debemos de tener algunos filtros que nos ayudan a digerir y entender la información que recibimos, pero no sabemos de que forma les llega (o les hacemos llegar) esta misma información a nuestros hijos. Lo que queremos es formarlos para que sean conscientes de la problemática que hay, para que actúen de forma respetuosa al medioambiente, y que cuiden de la mejor forma posible su planeta. Lo que no queremos es quitarles la esperanza del futuro, no queremos que pierdan su forma positiva de pensar y actuar, simplemente queremos formar seres humanos que sepan cuidar lo que tienen alrededor suyo.

¿Cómo lo podemos hacer entonces? Obviamente lo más valioso que hay es enseñar con el ejemplo. Si nosotros hacemos un esfuerzo por vivir de forma responsable, dejando la menor huella ecológica posible, eso es lo que aprenden nuestros hijos, y eso va a ser el ejemplo que van a seguir. Desafortunadamente lo que hacemos hoy en día la mayoría de las personas, no es suficiente, tenemos que hacer cambios más grandes para dejar de gastar los recursos naturales, y para dejar de contaminar a la tierra. Lo mejor que podemos hacer es seguir aprendiendo, y seguir luchando para lograr cambios positivos todos los días. No es necesario hacer todo en un día. La lucha en si, enseña algo muy valioso a nuestros hijos, les enseña que nadie es perfecto, y que siempre tenemos que luchar para que seamos mejores. Los cambios pequeños no nos cuestan tanto trabajo como quererlo hacer todo al mismo tiempo, y eso hace que los cambios tengan más probabilidad de ser permanentes. Si nosotros logramos impulsar cambios positivos en nuestros hijos, ellos nos van a regresar una energía mucho más grande, mucho más positiva, y ese primer impulso va a ser el inicio de un espiral positivo en la lucha contra el cambio climático. Juntos logramos mucho más y si enseñamos a nuestros hijos el camino correcto, ellos nos van a poder enseñar aún más. Son nuestros mejores maestros, nuestros críticos más grandes y nuestra inspiración. Con un poco de guía, a ellos no les va a costar ningún trabajo cuidar su planeta.

Es difícil controlar toda la información que les llega a nuestros hijos. Aunque siempre queremos protegerlos, es tanta la información que existe hoy en día, que no es posible filtrarlo todo. Hacemos un esfuerzo para que reciban los impulsos positivos, pero desafortunadamente también les llegan las noticias alarmistas y negativas, y no queremos que tengan pesadillas de inundaciones o que tengan miedo de vivir pensando que el mundo se vaya a acabar. Por eso es muy importante que nosotros tengamos una comunicación abierta con ellos para ayudarles a digerir las cosas negativas que reciban y complementar esa información con soluciones y visiones más positivas. Queremos niños que busquen soluciones, queremos hijos llenos de esperanza que toman por hecho que cada cosa que hagan tiene un impacto en el mundo, queremos niños que puedan ver su futuro de una forma positiva y llena de ganas de vivir bien. Esperanza es lo que nos llena de vida, no tenemos el derecho de quitarles eso a nuestros hijos. Junto con ellos podemos empezar a vivir más verde, en fin, el verde es el color de la esperanza ¿no?