miércoles, 20 de enero de 2010

La Cumbre de Copenhague

Por fin llegó la muy esperada Cumbre de la ONU sobre el Cambio Climático. Se lleva a cabo en Copenhague, Dinamarca del 7 al 18 de diciembre de este año, con la participación de alrededor de 15,000 personas incluyendo unos 100 líderes mundiales. La meta es llegar a un nuevo acuerdo para reemplazar el Protocolo de Kioto que vence en el 2012. Este protocolo mencionado de Kioto es un acuerdo internacional que se firmó en Kioto, Japón el 11 de diciembre del 1997, cuyo objetivo es frenar el calentamiento global, reduciendo emisiones de gases como el dióxido de carbono (CO2) entre otras medidas. La meta de Kioto era bajar las emisiones a nivel global un mínimo de 5% para el 2012 en comparación de las emisiones de 1990, pero especificando un porcentaje independiente por cada país.

La meta de este nuevo tratado es que incluya todos los países del mundo, y que logren un acuerdo más ambicioso que el tratado pasado. Mundialmente existe una preocupación muy grande sobre el cambio climático y esto va acompañado por mucha esperanza de que si se va a lograr, pero también acompañado de mucho escepticismo por los obstáculos que tienen que brincar para llegar a un acuerdo bueno. Hay tantos intereses diferentes (especialmente políticos y económicos), tantas circunstancias opuestas, y eso complica el trabajo de un tratado global, pero aún así, es algo que se tiene que lograr. El mundo no va a esperar mientras nos ponemos de acuerdo. Se sigue calentando el planeta, y seguimos viendo y viviendo las consecuencias de ese calentamiento global mientras discuten quien tiene la culpa, quien tiene que resolverlo, y quien lo va a pagar. La simple verdad es que lo estamos pagando todos, y la responsabilidad la tenemos que asumir cada uno de nosotros, habitantes de este planeta.

Podemos esperar 15 días de negociaciones duras, y algunos de los puntos que tienen que tratar y resolver para llegar a la meta son:

• Metas a largo plazo. Especificar cual es el calentamiento máximo para el año 2050, o que niveles de CO2 y otros gases podemos aceptar para ese entonces. Estos son algunos puntos que probablemente vayan a tratar.

• Bajar nivel de emisiones de gases de invernadero. Acordar cual va a ser la meta global, y especificar por país la meta.

• Financiamiento. ¿Quién va a pagar el costo de estos cambios? Aquí la mayoría está de acuerdo que los países industrializados tienen que pagar la mayor parte de la cuenta. La cuestión más bien es como lo van a pagar, en que proporción y de que forma.

• Tecnología. Para combatir el cambio climático dependemos de tecnologías nuevas. ¿Quién va a pagar eso, y quién va a disponer de esa tecnología? Aquí van a enfrentar problemas de patente y de dinero.

• Deforestación. ¿Cómo vamos a combatir la deforestación? Significa ingresos inmediatos a zonas de bajos recursos pero que tiene consecuencias negativas para el cambio climático, y que afecta a todo el mundo.

• Mecanismos como el bono de carbono. Son herramientas sobre todo para los países ricos, ¿pero cómo van a tomar en cuenta estos mecanismos? Hay que ver como se pueden manejar para que sean una ayuda para los países con bajos recursos, sin que frenen el trabajo de bajar emisiones en los países ricos.

• Reglas para ciertos sectores problemáticos. Aquí pueden ser reglas globales para el sector aviar o industrias especialmente contaminantes.

Estos puntos y muchos más se van a tratar en Copenhague, y yo como millones de otras personas tengo la esperanza de que sí puedan lograr grandes cosas. ¡Lo tienen que lograr! ¡Vamos por un acuerdo ambicioso en Copenhague!

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